jueves, 5 de julio de 2012

Acto de creación desesperado. Primera parte de un número infinito.


Cuando uno no tiene nada que decir la habitación se llena de un vacío extraño, las palabras se atascan, no salen, estorban y se vuelven incómodas e irritantes para la quietud, que reclama su espacio, los bloques de ideas parece que duermen y les falla la memoria, nos invade a todos la modorra, el vacío, lo trivial, no hay nada que valga la pena ser dicho, no hay nada que merezca ser pensado ni escrito, para qué, por qué, a quién le interesará, a no, eso seguro, ¿pensabas que ibas a escribir durante toda la vida?, ¿tan original te consideras?, ya no recuerda uno ni sobre qué le gustaba escribir, sobre qué, sobre quién, ¿acaso estabas enamorado y ahora no?, ¿acaso estás enamorado y antes no lo estabas?, ¿qué era aquello que decías, la vida está hecha para ser escrita, primero, pensada, después y por último etcétera?, mierda, cansancio, mesa, libro, ordenador, todo es de cristal y de madera, las superficies se contorsionan sobre sí mismas y se adueñan del milagro, del misterio y de la escritura, no puede haber nada ahí adentro, no puede haber nada aquí adentro, retruécanos, juegos de palabras, qué decir cuando no hay nada que decir, la inspiración atiborrada de sentencias y de citas ajadas, frases cojas e inconexas, vacío, yo, cuélgate de la lámpara, lanza el sofá por la ventana, sal a la calle, insulta a alguien en alemán, en hebreo y en griego, emborráchate hasta vomitar la bilis en las faldas de la camarera, rómpete la mano contra el estómago de un policía, haz algo, vive un poco no por ti, sino para poder contarlo, una historia de crápulas, sobre la mala vida, mastúrbate frente a la ventana, haz de la superficialidad un relato, una ideología, haz algo, huye, hazte el haraquiri que te estás durmiendo encima del teclado, qué escribirás después no importa, el relato, obviamente, no nace en una libreta, hasta el peor de los escritores sabe que el relato nace bajo una farola, a la puerta de un bar, sobre el pollo de la cocina, tras la cortina de la ducha, allí entra el narrador para congelar el momento y desangrarlo como mejor pueda o como más le apetezca, esto es cuestión de gustos, pero no lo haces, está claro que no lo haces porque sigues sentado en la silla, paralizado ante la inevitabilidad de las cosas, petrificado y ausente, aunque pongámonos en situación, si fueras un coche no serías más que el chasis, si fueras un cuaderno no tendrías ni líneas, una botella vacía y con las comisuras malpintadas de carmín reseco, una bombilla que no enciende, el cascarón de una casa vieja, de la que alguien emigró, destripada, y lo peor es que todo esto sienta bastante bien, notar cómo el tiempo resbala y fracasa, leer los titulares del periódico, no ir más allá, las palabras que pasan como perros en una carrera de galgos, fiuuuuuuuuuu, allí van, hacia el olvido, la parálisis de la vergüenza, la parálisis de los anhelos, ¿nihilismo?, es la pasividad sin depresión, la depresión es una posición activa, hablo del aplazamiento indefinido de la vida, escurrirse por debajo de las cosas porque no merecen ser escritas, pensar por inercia, no hablar por pereza, no escribir porque nadie ha dicho que haga falta hacerlo y si lo ha dicho no te ha sonado muy convincente, ya no recuerdas el momento en que decidiste escribir, mucho menos por qué lo hiciste, tampoco importa, esto es lo mejor, tampoco importa, escribir un twitt sobre el descubrimiento del bosón de Higgs o un poema de tres páginas, NO ES FÁCIL ACLARARSE, cualquier cosa que hagas valdrá la pena o no, eso nadie te lo va a decir, ¿cómo se malgasta una vida?, escribiendo, escribiendo a todas horas y nada más, o escribiendo de vez en cuando y dejando algo de tiempo para otras cosas, o sea, escribiendo a medias, escribiendo sin llegar a publicar nada,  o escribiendo grandes historias, historietas de aventuras y crímenes policíacos y personajes históricos para ganar muchísimo dinero, o no haciendo nada, buscarse un trabajo y llevar una vida normal dedicándote a tus hijos, a tu mujer y a tu familia que ves los domingos en una comida que siempre acaba en borrachera y alguna que otra confesión, ¿cómo se malgasta una vida, qué significa esto, si todo está plagado de gerundios?, decidir no escribir una línea más en tu vida o dejar correr las horas, la noche hasta el día siguiente por ver si se te pasa la abulia, tampoco es fácil, y tampoco es importante, hagas lo que hagas el vacío siempre estará ahí, la certeza del silencio, la certeza de la inutilidad general de todo, las calles tanto si escribes como si no, emborracharte tanto si escribes como si no, vivir una vida crápula, el placer de lo momentáneo, tampoco lo haces, porque sigues mirando por la ventana el tráfico que circula cada día, los árboles, son preciosos, pero esto te lo guardas para ti porque no merece ser escrito, porque es ridículo.

martes, 22 de mayo de 2012

MIL PUNTOS SIN PALABRAS

..................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................
No coment

martes, 8 de mayo de 2012

Agradecido, y abrumado por la invitacion, me dirijo hacia lo desconocido, hacia una cascada de emociones, hacia una encerrona con muy buena pinta, hacia una batalla encarnizada, en la cual espero poder miraros a los ojos y rec onocer a los grandes señores de la guerra de las letras que os supongo, lo dicho gracias y ante todo quiero que sepais que espero aprender mucho de todos los miembros del blog y que aunque no juguemos en mismas divisiones, mi campo esta muy embarrado, y mi estadio es ruidoso y aguerrido como ninguno, buena suerte y q escriba el mejor.       PURE FUNCTION

viernes, 4 de mayo de 2012

hui

Wassily


Nació en Moscú en 1866. En 1871 su familia se traslada a Odesa. De 1886 a 1889 estudia Leyes en Moscú. En 1896 rechaza un puesto docente en la Universidad de Dorpat para estudiar Arte en Múnich.

En 1901 funda el grupo Phalanx, cuyo propósito principal es introducir las vanguardias francesas en el provinciano ambiente muniqués, para lo cual abre una escuela en la que da clases. Sus pinturas de los primeros años del siglo son paisajes ejecutados con espátula, en un principio sombríos, para luego adquirir una intensidad casi fauve; también pintó temas fantásticos basados en tradiciones rusas o en la Edad Media alemana; este período está marcado por la experimentación técnica, en particular, en el uso del temple sobre un papel oscuro, para dar una impresión de superficie transparente, iluminada desde atrás. La consistencia tonal del claroscuro enfatiza el esquema borrando la distinción entre las figuras y el fondo, resultando una composición casi abstracta.

En 1902 expone por primera vez con la Secession de Berlín y realiza sus primeras xilografías. En 1903 y 1904 viaja por Italia, Países Bajos, África y visita Rusia. En 1904 expone en el Salón de Otoño de París.

En 1909 es elegido presidente de la Nueva Asociación de Artistas de Múnich (NKVM). La primera exposición del grupo tiene lugar en la galería Thannhauser de Múnich ese mismo año. Hacia el final de la década, las pinturas de Kandinski denotan una gran tendencia a la plenitud por la equivalencia en intensidad de las áreas de color y la superficie reluciente que destruye toda ilusión de profundidad. Las series de cuadros de jinetes en combate comienzan en 1909 y, en ellas, la línea del horizonte se va erradicando gradualmente, al igual que otras referencias espaciales.


Arte abstracto

El desarrollo de Kandinski hacia la abstracción encuentra su justificación teórica en "Abstracción y empatía" de Wilhelm Worringer, que se había publicado en 1908. Worringer argumenta que la jerarquía de valores al uso, basada en las leyes del Renacimiento, no es válida para considerar el arte de otras culturas; muchos artistas crean desde la realidad pero con un impulso abstracto, que hace que las últimas tendencias del arte se den en sociedades menos materialistas.

Kandinski, al igual que Piet Mondrian, estaba interesado también en la teosofía, entendida como la verdad fundamental que subyace detrás de doctrinas y rituales en todas las religiones del mundo; la creencia en una realidad esencial oculta tras las apariencias, proporciona una obvia racionalidad al arte abstracto.

En De lo Espiritual en el Arte, habla de una nueva época de gran espiritualidad y de la contribución de la pintura a ella. El arte nuevo debe basarse en un lenguaje de color y Kandinski da las pautas sobre las propiedades emocionales de cada tono y de cada color, a diferencia de teorías sobre el color más antiguas, él no se interesa por el espectro sino sólo en la respuesta del alma.

En 1913 una obra suya se presenta en el Armory Show de Nueva York y, al estallar la Primera Guerra Mundial, vuelve a Rusia, instalándose en Moscú, hasta 1921.



A partir de la Revolución de octubre de 1917, Kandinski desarrolla un trabajo administrativo para el Comisariado del Pueblo, para la Educación; entre los proyectos de este organismo está la reforma del sistema educativo de las escuelas de arte. En 1920 fue uno de los fundadores en Moscú del INJUK (Instituto para la Cultura Artística), a lo largo de este año surgió el conflicto entre Kandinski, Malévich y otros pintores idealistas frente a los productivistas (o constructivistas), Vladímir Tatlin y Aleksandr Ródchenko, este último grupo encontró un fuerte apoyo en "el plan de propaganda monumental" ideado por las autoridades políticas de la Revolución. La situación de tensión propicio la salida de Kandinski de Rusia.

En 1922 se traslada a Weimar (Alemania), donde imparte clases teóricas para la Escuela de la Bauhaus. En 1926 se publica su libro Punto y línea sobre el plano. Contribución al análisis de los elementos pictóricos. Una continuación orgánica de su trabajo anterior De lo espiritual en el arte. Permanecerá en la Bauhaus hasta el año 1933 cuando el Tercer Reich clausura la institución.

Desde 1933 se establece en París donde continuará su carrera como artista hasta su fallecimiento en 1944, a los 78 años de edad, en Neuilly-sur-Seine (Francia).